7 recetas de mascarillas faciales con ingredientes caseros para piel sensible
Cuando tienes una piel sensible esto es lo primero que debes abordar, antes de los aspectos como los poros obstruidos, las arrugas o las líneas de expresión. Si tienes una piel irritada o inflamada el primer paso que debes dar es encontrar la razón por la cual tu piel esta sensible.
Se que puede ser un algo complejo, ya que puede deberse a alguna situación interna, una alergia, tu propio estilo de vida o incluso genética. En fin, la piel sensible puede ser el resultado de múltiples factores. Así que aquí te dejaré esta guía que podría ayudarte específicamente a tratar tu piel sensible.
Cómo identificas la piel sensible
De acuerdo a un artículo publicado en pubmed.gov, entre el 60-70% de las mujeres sufre de piel sensible, mientras que el 50-60% de los hombres la padece. Si notas que tu piel re enrojece con facilidad, si experimentas urticaria, ardor, picazón, piel con escamas, entonces es muy probable que sufras de piel sensible.
Ahora tienes que contestar las siguientes preguntas ¿bebes suficiente agua?, ¿haces ejercicio regularmente?, ¿duermes bien?. En caso de que contestaras no a alguna de estas preguntas, entonces tu piel puede verse afectada. Pero no te preocupes, porque si haces algunos cambios, entonces la sensibilidad de tu piel empezará a mejorar.
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Revisa los productos que usas
Tienes que revisar minuciosamente los productos que usas regularmente para el cuidado de tu piel, desde champús, jabones, maquillaje, cremas humectantes, mascarillas que compras en catálogos o el supermercado, en fin, todos los productos que usan y tienen contacto con tu cutis.
Lo mejor es que te familiarices con los ingredientes que vienen en las etiquetas de los productos que usas, tienes que informarte qué es lo que estas poniendo en tu piel, sobre todo en tu rostro; no compras los productos solo porque se ve bonito en un anuncio o porque lo recomienda un youtuber, instagramer o tiktoker famosa/o.
Entre los ingredientes que son muy agresivos para la piel sensible están las fragancias, los parabenos, los sulfatos, aceite mineral, químicos que tiene como base el ácido paraaminobenzoico (PABA).
Qué usar en la piel sensible
Solo necesitas unos cuantos ingredientes para empezar a tratar tu piel sensible. Por ejemplo, puedes empezar haciendo un lavado de tu rostro con miel. Como nutriente y antiinflamatorio, el aceite de onagra (primrose) es una opción maravillosa, y el agua de rosas es un excelente tónico facial.
Si ya identificaste que tu sensibilidad en la piel es causada por algún producto que incluyes en tu rutina habitual, lo que debes hacer es ir probando uno a uno los productos o ingredientes que vas a incluir en tu nueva rutina, de esta forma te será muy fácil identificar qué productos o ingredientes te funcionan y cuales no.
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Recetas de mascarillas faciales para piel sensible
Mascarilla calmante con avena y yogurt
Esta mascarilla de solo dos ingredientes es ideal para la piel sensible, ya que tiene efectos calmantes y antiinflamatorios. La avena es un ingrediente básico en las recetas de mascarillas para la piel sensible, sobre todo cuando tienes hinchazón o eczema.
Ingredientes
- 1/3 de taza de avena natural
- 4 cucharadas de yogurt natural
Asegúrate que la avena que estas usando sea natural, es decir, que no saborizantes ni aditivos.
Instrucciones
- Lo primero que debes hacer es cocer la avena de acuerdo a las instrucciones en el empaque.
- Separa la avena cocida del agua y ponla junto con el yogurt natural en la licuadora y muélelos hasta obtener una pasta homogénea.
- Con tus dedos aplica una capa gruesa de la mezcla sobre tu rostro, déjala actuar durante 10 minutos.
- Luego retira y enjuaga con agua tibia.
- Finalmente usa tu humectante o suero facial.
Mascarilla de té matcha y aloe vera
El aloe vera normalmente es conocido por sus propiedades en el tratamiento de las quemaduras de sol; sin embargo, tiene vitaminas A y C que ayudan a combatir las manchas oscuras y a iluminar naturalmente la piel.
Además previene la aparición de las líneas finas de expresión y las arrugas. Por otro lado, el té matcha tiene propiedades antibacterianas que ayudan a limpiar la piel y a aumentar su elasticidad.
Ingredientes
- 2 cucharadas de gel de aloe vera
- 1 cucharadita de té matcha
Instrucciones
- Mezcla el gel de aloe vera con el té matcha hasta que obtengas una pasta uniforme.
- Aplica la mascarilla en tu rostro y déjala actuar por 15 minutos.
- Retírala y enjuaga con agua tibia.
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Mascarilla facial curativa con aceite de coco y canela
La mascarilla casera con aceite de coco y canela molida te ayuda cuando tienes líneas de expresión más definidas y demasiada exposición al sol.
Esta mascarilla dejará tu cutis con un aspecto impecable, porque el aceite de coco contiene grasas saludables y vitamina E, que ayuda a tu piel a tener más elasticidad y le proporciona un brillo más natural y saludable, ya que también actúa como un humectante. Por su parte, la canela contribuye a eliminar las imperfecciones en tu rostro.
Ingredientes
- 1/2 cucharada de aceite de coco
- 1/2 cucharadita de canela molida
Instrucciones
- Mezcla el aceite de coco con la canela molida.
- Aplica la mascarilla en tu cutis y deja que actúe por 15 minutos.
- Retira y enjuaga con agua tibia.
Mascarilla para los ojos de pepino y miel
Esta es una mascarilla de ojos que rellena las líneas finas ayudando a minimizar la aparición de las famosas patas de gallo. El alto contenido de agua del pepino ayuda a proporcionar la hidratación que tu piel necesita, además de funcionar como un antioxidante. La miel se desempeña como un humectante que mantiene la humedad en el área bajo los ojos.
Ingredientes
- 1/4 de pepino
- 1/2 plátano maduro
- 1 cucharada de miel
Instrucciones
- Pela el pepino y ponlo en la licuadora, junto con el plátano y la miel.
- Muélelos hasta formar un puré suave.
- Lleva la mezcla al refrigerador durante 30 minutos.
- Aplícala en la zona de debajo de tus ojos y deja que actué por 15 minutos.
- Después retira la mascarilla y enjuaga.
Si te sobró un poco de esta mascarilla casera para ojos, puedes guardarla hasta por una semana en el refrigerador en un recipiente bien sellado.
Mascarilla casera antiinflamatoria de pepino y avena
La mezcla del pepino con la avena resulta en una mascarilla con propiedades refrescantes y antiinflamatorias, que hidratan y calman la piel inflamada.
Ingredientes
- 1/2 pepino pequeño o 1/4 de pepino grande
- 1/2 taza de avena natural
- 1 cucharada de yogurt natural
Instrucciones
- Pela el pepino y ponlo en la licuadora, agrega el yogurt natural y la avena.
- Mézclalos hasta que obtengas un puré homogéneo y suave.
- Unta la pasta sobre tu rostro, sobre todo en las zonas irritadas y déjala actuar por 20 minutos.
- Retírala y enjuaga con agua fría.
Mascarilla facial casera de aguacate con aloe vera
Los aceites que contiene el aguacate son una opción maravillosa para la piel sensible, ya que tienen capacidad para proteger la piel de los radicales libres, además de sus propiedades antiinflamatorias. Por su parte, el aloe vera y avena potencian las propiedades curativas de esta mascarilla casera.
Ingredientes
- 1/2 aguacate
- 2 cucharada de gel de aloe vera
- 2 cucharadas de avena en polvo
Instrucciones
- Tritura el aguacate hasta obtener un puré suave.
- Mézclalo muy bien con la harina de avena y el gel de aloe vera.
- Aplica la pasta sobre tu cara y déjala actuar por 15 minutos.
- Luego retira y enjuaga con agua tibia.
Mascarilla casera de papaya para una piel radiante
Las enzimas naturales que contiene la papaya ayudan a exfoliar tu piel de una forma muy delicada, esto hace que la piel seca y opaca se ilumine naturalmente sin causar irritación.
Ingredientes
- 1/4 de taza de papaya picada
- 1 cucharadita de miel
- La clara de 1 huevo
Instrucciones
- Pon todos los ingredientes en la licuadora y muélelos hasta obtener un puré homogéneo.
- Aplica la mascarilla sobre la piel y espera 15 minutos o hasta que sientas que la mascarilla aprieta tu piel.
- Retira y enjuaga tu cara con agua tibia.
Si sientes que te incomoda el efecto tensor provocado por la clara de huevo, entonces puedes usar solo la mitad o eliminarla de la receta y solo usar la papaya y la miel.